Los espacios figurales y lingüísticos en Occidente se especifican y separan especialmente con el advenimiento de la modernidad y en forma paralela con la gestación de la noción de espacio cartesiano. En la Antigüedad y en la Edad media, sin embargo, eran frecuentes una serie de manifestaciones en las que ambas dimensiones permanecían unidas, por ejemplo, en los tecnopaegnias, poemas que comprendían todo tipo de puestas en página originales y de juegos con letras.